viernes, 22 de febrero de 2008

Los puntos de oro

Pues no, no se tratan de puntos de alguna aerolínea o de algún supermercado de la zona. Se trata de los cuatro puntitos que tuvieron que dar en la cabeza al Dani hace un mes cuando envistió la mesilla de noche.

Como no podía ser de otra manera, el suceso ocurrió a las 12 de la noche por lo que no nos quedaba otra que ir a Urgencias del hospital (Emergency Room, como la serie ER), en fín, hete aquí un resumen numérico del tema:

Hora de entrada: 12:32 am
Temperatura en el exterior: -7º C
Tiempo de espera en sala de urgencias: 1.5 horas
Temperatura interior del niño: 36.3 ºC
Peso: 14 k (nunca sé porqué te pesan y miden siempre, sea cual sea el motivo de la consulta)
Tiempo de espera en sala de curas: 40 minutos
---->Todavía no le han curado la herida ni con un poco de agua oxigenada, la sangre ya está seca.
Tiempo de cura y sutura: 35 minutos.
Personal: un médico y una enfermera, los auxiliares, el padre y la madre.
Hora de salida: 3:32 am

En dólares:
Entrar por la puerta del hospital: $ 138
Salir con cuatro puntos y 8 pegatinas de Spiderman: $ 410
Quitarle los puntos una semana después: $ 44
Total (sin gasolina ni coste de oportunidad de estar en la cama) = $ 592

Conclusión:
Nos salió el punto por unos $ 148 que vienen a ser unos 100 euros. Por seguridad, hemos decidido tener al niño con casco dentro de la casa, para evitar riesgos.

6 comentarios:

Peter dijo...

Pues en una de esas merendolas con amiguitos del Dani, disfrazais a uno de Poli, a otro de jefe indio, a otro de motero, a otro de marine y a otro de vaquero y ya tenéis Los Village People preparados.

Veo que insitís en el carnaval

Anónimo dijo...

La cicatriz quedará muy bien con los pantalones de camuflaje y la cabeza afeitada. La metamorfosis sigue su ritmo...

Un abrazo:
Abel

Anónimo dijo...

Me ha gustado lo del coste de oportunidad de estar en la cama...le estás empezando a sacar partido al Máster! Conociendo al padre del chiquitín, raro que no le haya traído un casco del trabajo...

Anónimo dijo...

El día que os volvéis a España is not Spain, vais a necesitar un contenedor adicional para los disfraces de Dani.

Si os sirve de consuelo, las cantidades, en euros, no son para tanto...

Anónimo dijo...

Hola, Jesús, María José y Daniel:

Somos Carmen y José Luís (¡los “Mañas”!). El pasado domingo estuvimos comiendo unas magníficas migas en casa de Amando y Nati. Como tus padres hacen siempre cantidades industriales, Pedro e Irene pudieron disfrutarlas también al día siguiente. Total, que nos lo pasamos estupendamente. Nos hablaron de vuestro blog, y lo estuvimos viendo allí mismo. En él conocimos a vuestro hijo Daniel, que es un figura, y que “abusa” de vosotros.

Por casualidad, el lunes siguiente mientras cocinaba, Carmen encontró un libro de recetas de Almadén que nos regalaron Amando y Nati y, al hojearlo, vimos una dedicatoria que incluía este fragmento de El Quijote que creo que os gustara. Dice así:

“Lo primero que se le ofreció a la vista de Sancho fue, espetado en un
asador de un olmo entero, un entero novillo; y en el fuego donde se había
de asar ardía un mediano monte de leña, y seis ollas que alrededor de la
hoguera estaban no se habían hecho en la común turquesa de las demás ollas,
porque eran seis medias tinajas, que cada una cabía un rastro de carne: así
embebían y encerraban en sí carneros enteros, sin echarse de ver, como si
fueran palominos; las liebres…”

Capítulo Veinte. “Donde se cuentan las bodas de Camacho…” Parte Segunda. El Ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha

Esperamos que en esas frías tierras (ayer vimos un reportaje en la tv sobre los búfalos, y eso nos recordó a Buffalo City) estas palabras de Cervantes os sirvan de recuerdo de vuestro país, que ahora, en una inusual primavera, está lleno de almendros y prunos con flores blancas y rosas. Un fuerte abrazo para los tres de los cuatro.

Anónimo dijo...

Os estáis relajando, diez días sin decir ni pío, la afición os echa de menos...

Un abrazo:
Abel